
Hay que ver qué poco gusta hacer las crónicas cuando se pierde. En fin, algo contaremos...
Lo primero, comentar la situación previa del partido. Nuestro "capitán general" en anotación permanece lesionado, al igual que el base "titular" que se (me) resentía todavía de un esguince de rodilla provocado en el partido contra Boskozaleak.
Se presentaban todos los alicientes para el "Homicius Time", pero el propio base "suplente" se autodescartaba para convertirse en el gran protagonista del encuentro.
En esa tesitura, el partido se prestaba a apretarse los machos (para combatir el frío helador del frontón de Berriotxoa) y tratar de jugar en equipo.
El primer cuarto se mantuvo muy bien el tipo y se jugó con mucha fluidez y acierto. Perkins Silva rememoraba sus grandes y pasados tiempos de ala-pivot, bien secundado en la pintura por el mariscal de campo "Peter Panizo".
Mientras Mister T se postulaba como base ocasional, cometido que cumplió con creces. Sin embargo, no conseguimos cerrar bien los tiros exteriores del rival en ese primer cuarto y en el segundo parcial un pequeño bajón nuestro les permitió acometer el descanso con 10 puntos de ventaja.
El tercer cuarto resultó un toma y daca en el que no conseguimos recortar e incluso llegamos a ampliar la diferencia negativa. Pero cuando parecía que todo estaba perdido llegó la reacción inacabada comandada al grito de Noelidas y espoleada desde el público por la hinchada visitante, osea, Mr. Pitin. El cambio a defensa zonal nos permitió llegar a colocar el “electrónico” (que estaba apagado por cierto) a solo 3 puntos de diferencia. Pero no fue suficiente, entre el señor de Orange (vamos, el arbitrucho de turno) y que el rival jugó con bastante acierto los ataques finales, no pudimos hacernos con la victoria. Al menos ganamos el average particular, lo cual puede que nos ayude al final de la primera fase.
La trastienda del partidoMención aparte hay que hacer del triple giro a la rotonda de Santutxu que protagonizó la expedición de coches en el camino de ida. GPS Lodeiro estaba justo en ese momento haciendo un “upgrade” a la versión 2.0
Las cenas de empresa, ayyy cuanto daño hacen al basket. El índice alcohólico de los supuestos directores de juego el sábado antes del partido era superior al de los kiniteros del Hall of Fame el viernes anterior en el Zazpi, y eso ya es mucho decir!.
Y no podíamos despedirnos sin desear la mejoría de Homicius y la de Berce para los próximos entrenamientos y partidos allá por el 2008.
Buenos días y saludos cordiales.
Etiquetas: Crónicas 2007-2008